13 febrero 2011
El huevo: el malo de la clase era en realidad bueno
Foto realizada por Dieta y Deporte (D&D), el 12 de febrero de 2011.
Os pongo un resumen de varios artículos que leí en la revista Consumer Eroski, que creo que completan las dos entradas anteriores sobre el huevo.
El huevo: el malo de la clase era en realidad bueno
Su mala reputación de los últimos años es infundada, no aumenta el colesterol y es un excelente alimento.
Una sombra llamada colesterol...es un alimento de gran valor alimenticio, muy rico en nutrientes, con proteínas de gran valor biológico, lecitina, y minerales y vitaminas.
Adiós al mito del colesterol
...Nada de restringir en exceso el consumo de huevos, si bien quienes sufren hipercolesterolemia deben moderar su consumo, al igual que el de otros alimentos ricos en colesterol o en grasa saturada.
Las virtudes del huevo
El huevo es un alimento esencial en la dieta. Contiene abundantes (13%) proteínas más completas y de mayor valor biológico, hasta el punto de que se tomen como patrón para determinar la calidad proteica de otros alimentos, ya que contienen en una proporción perfecta los aminoácidos esenciales que el organismo necesita. El aporte de grasas (11%) se concentra en la yema, y predominan las grasas insaturadas sobre las saturadas, un perfil lipídico saludable. Destaca, además, el aporte de vitaminas A, E y otras vitaminas hidrosolubles y de minerales como fósforo, sodio -es uno de los alimentos de origen animal más rico en este mineral-, zinc y selenio. Algunos de estos últimos nutrientes, que son gran importancia en la dieta diaria, no pocas personas los ingieren en cantidad insuficiente. El huevo es también buena fuente de la vitamina D (liposoluble y, por ello, presente en la grasa de los alimentos), que se puede sintetizar en la piel cuando el cuerpo recibe la luz del sol pero en personas enfermas o que salen poco de casa, el aporte dietético del huevo puede ser fundamental.
El tamaño, sí que importa
..En el caso de los huevos este popular principio no se cumple en absoluto. Todo lo contrario. Así lo constató un reciente análisis llevado a cabo por la
Revista CONSUMER EROSKI en el que se analizaron huevos de diversos tamaños y tipos.
Huevos de diversos tipos Frescos y libres de salmonella pero con defectos de calidad
El huevo, rico en mitos y preguntas:
No más de tres huevos por semana.
No está justificado eliminarlos de la dieta ni restringir su consumo a 2 ó 3 por semana.
Los de yema muy amarilla son más saludables.
Falso. El color de la yema, más rojizo o más pálido, nada tiene que ver con la calidad del huevo ni con su sabor; este color es fácilmente manipulable por el productor mediante pigmentos que se añaden al pienso de las gallinas ponedoras.
Los huevos fritos, ¿engordan mucho y se digieren peor?
La digestibilidad del huevo depende de la tolerancia individual de cada persona y de la forma de cocinarlo. En cuanto a calorías, el huevo frito contiene algo más de grasa que el crudo o cocido, aunque no tanto como se piensa.
¿Cómo saber si un huevo está fresco?
La posición de la yema y de la clara del huevo indica si el producto está fresco o no. La yema de un huevo fresco es densa, bien centrada en la clara y con cierto abombamiento...Las "nubes" son señales de que el huevo está fresco.
Los huevos duros son indigestos.
De todas las modalidades de cocinado de este alimento, el huevo duro es el que resulta más indigesto.
Un huevo grande es mejor.
Al contrario: en general, los huevos, cuanto más grandes, peor calidad tienen.
Más información:
El huevo: el malo de la clase era en realidad bueno revista.consumer.es (Última actualización 7 de abril de 2010)
Huevos de diversos tipos frescos y libres de salmonella pero con defectos de calidad revista.consumer.es (Octubre de 2008)
Tengo colesterol, ¿cuántos huevos puedo consumir por semana?
Los huevos, preguntas y respuestas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario